TRADUCTOR

miércoles, 15 de julio de 2015

TODA UNA ETERNIDAD

21

TODA UNA ETERNIDAD

Tan solo hace un día que su vida ha cambiado de rumbo, han pasado veinte años sin sentir el calor de un beso, la caricia escapada de un ser amado, el susurro de una palabra de amor dulce y atrevida.
Algo está pasando en su interior, una fuerza desconocida arde desde lo más profundo y se pregunta que es.
Sus recuerdos adormecidos le invaden como un soplo caliente, ese sentimiento aletargado, escondido, está aflorando sin ningún control.
Siente tristeza por sus años de juventud perdidos en el aire, de oportunidades disipadas sin sentido.
Durante largos años, ha estado cosiendo remiendos en su corazón, algo se escapaba de entre sus puntadas, algo asomaba entre los hilos que ella iba cerrando, calmando para no dejar escapar  algo imposible, impropio, inoportuno, inalcanzable.
Hace un día que dejó atrás su vida sin ilusiones creyendo que su camino se había adentrado en un bosque oscuro y sin salida.  
Hace solo un día que su corazón está perdido, no entiende nada, confuso y aturdido se debate entre la lógica y la locura, la realidad y  la insensatez, el amor o el desamor.
La vida la está esperando con las manos abiertas, deslizándose entre sus dedos esas caricias deseadas, esos besos anhelados,  esos susurros atrevidos y provocadores, esas  miradas deseosas.
Casi puede sentir al cerrar los ojos una suave brizna de dedos suaves recorriendo su piel, acariciando su cuerpo palmo a palmo, poro a poro, de labios húmedos besando sin miedo y con pasión, de sentir junto a su cuerpo el cuerpo del ser amado, ese ser que nunca tuvo pero que rememora, que nunca sintió pero lleva pegado en cada centímetro de su cuerpo, siente esa mirada que nunca vio recorriéndola con dulzura.
Otra vida existió es que se amaron y deben repetirlo, ella está confusa, aterrada, asustada, incrédula…esperanzada.  
Los días pasan irremisiblemente esperando su llamada, la larga espera es densa y nerviosa, deseada y atormentada, caliente como una brisa cerca del mar.
Esas horas interminables de niña quinceañera esperando una señal, el sonido del teléfono es injusto con ella, la sobresalta y la desilusiona, la enerva y sume en una nube lejana paseando burlona por sus pensamientos.
El destino está jugando con ella, imagina a su amado acercándose a ella con miedo y a la vez con valor, recuperando esos años perdidos y esas caricias engalanadas, renaciendo esos deseos escondidos en su bolsillo, abriendo sus manos al aire lanzando telarañas de ilusiones.
Imagina su ser amado llamándola en sueños, abrazándola entre sus brazos con la pasión contenida durante largo tiempo y ofreciéndole su cuerpo, su mente… su alma para toda la eternidad.

Ella espera bonita para el…
El… está llegando.


     
 2015

No hay comentarios:

Publicar un comentario